Lo que importa es lo que piense Dios de mí

A veces uno se preocupa porque hablan mal de uno y uno quiere tratar de remediar algo o hablar para que no sea así, es difícil como humano no sentir la necesidad de que hablen bien de uno y más cuando lo que hablan mal no es cierto, pero reflexiono y encuentro que lo importante es lo que Dios piense de mí. Puede uno tratar de convencer a otro, pero pierde el tiempo. El ser humano siempre pensará de acuerdo a sus actos, de acuerdo a su comportamiento. Si actúa mal, pensará mal de los demás, si actúa bien, sabe que actúa de buena manera, de buena fe. A veces baja uno la guardia frente a personas que se camuflan y que uno sabe que su comportamiento y actuar no ha sido correcto ni transparente y uno se confía y baja la guardia u olvida tratando de superar los inconvenientes pasados, piensa uno que la persona ha cambiado y que olvida como uno lo hace, o que es como uno, pero no, ante el más mínimo detalle que uno les mencione aprovechan la oportunidad para con lo mismo que uno ha dicho lanzar el ataque a través de otros a quienes les inflan los oídos con comentarios trastornados para ganar confianza, estas personas siempre tratan de mostrar apariencia de piedad y dulzura, y por esto uno baja la guardia y se confía, pero lo único que siempre esperará de estas personas es el ataque sorpresivo, no directo de ellos, sino a través de otros por los comentarios que les han hecho creer. En los postreros días vendrán tiempos peligrosos, porque habrá hombres que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita. Los hombres darán cuenta de toda palabra ociosa en el día del juicio.

La Palabra de Dios es Indestructible

La Palabra de Dios se cumple, todo se acabará, pero su Palabra permanecerá por la eternidad, por siempre. Buscadme y viviréis dice ÉL. En momentos de angustia y desesperación me dice: ÉL guardará tu alma. Si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guardia. Por más que nos esforcemos en cuidar algo, si ÉL no está y no tenemos su aprobación, no hay nada que hacer. Aunque contra mí se levante guerra, yo estaré confiado, y esa confianza está anclada en la fe en Él que dice nunca te dejaré y nunca te desampararé. Tu eres mi ESCUDO

Actuando con toda contundencia

En momentos difíciles de nuestra vida. Cuando la crisis, la tragedia y catástrofe llega, pienso que se debe actuar con toda la contundencia y determinación. Mientras haya vida hay esperanza. La seguridad no se negocia.

Trabajar con honestidad lo vale todo

Trabajar con honestidad, honradez, transparencia e integridad, así sea poco lo que tenga que hacer, demuestra que soy digno de recibir el salario más alto que sea. Ser honesto lo vale todo. Ser honesto cuesta, tiene un valor incalculable. Se recibe desde lo alto.

Haciendo todo con amor

Sé que mis palabras en este blog son muy simples y no tienen mucha técnica, sé que tampoco soy un escritor pero lo que hago lo hago con amor. Quiero anotar unas palabras que escuché en la iglesia este domingo que pasó, en el mensaje se decía que sobre esta roca edificaré mi iglesia, esa roca esa piedra es la enseñanza de Cristo, la doctrina, su Palabra. Si se señala, critica, juzga y murmura está mal cimentado, mal fundamentado. Defectos muchos. Debo bendecir no criticar a nadie. Estar disperso es no estar unido. En momentos de angustia solo pido a Dios, suplico a Dios que todo salga bien. Que Dios tenga misericordia. Danos fuerzas Dios mio para soportar las adversidades.

Haciendo todo con excelencia

Me enseñaron alguna vez que cuando uno iba ir a la iglesia debe ser lo mejor vestido porque debe uno pensar, si ante un humano que tiene un cargo o es jefe o tiene poder se viste de la mejor manera, ¿cuánto más para presentarse ante Dios?. No estamos preparados para estar frente a Dios, nuestras vestiduras están manchadas de pecadores y errores. Ayúdanos Señor hacer todo de la mejor manera posible, bien sea en el trabajo, en la casa, en la iglesia, en las labores que desarrollas con nuestras manos, todo sea realizado con excelencia no a medias y más aún cuando se nos dice o se nos recomienda. Causa molestia decirle a alguien, una tras otra vez: mire acá tiene que mejorar y corregir. Y luego pasa uno en otra oportunidad y ve los mismos errores. Me pregunto acá: ¿Cómo haré yo sentir al Señor con tanto que ÉL me corrige y yo insisto en mis errores?. Con qué me presentaré ante el Señor, recuerdo la canción, con un corazón contrito y humillado, así me presentaré ante Jehová.

Lidiando con el pasado

A veces en la vida vienen a nuestra mente recuerdos del pasado, de cosas que hicimos o dejamos de hacer, que incluso nos angustian, nos preocupan. Ahí es el momento de aferrarse a su mano, a la mano de aquel que nos amo y se entregó por nosotros, para superar el tiempo malo. Por mi parte es difícil, aferrarme de su mano, y más cuando hay errores latentes, pero seguiré adelante e iré a buscar su presencia. En mi está el reconocerlo pero no el quererlo hacer.